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Ingredientes:
4 a 5 papas medianas 50 gramos de manteca, 1 cebolla en rodajas, 800 ml. De caldo de pollo, 1 ramita de tomillo, 1 hoja de laurel.

Preparación:
Precalentar el horno a 200 C. pelar las papas, eliminar los bordes y cortarlas en rodajas finas con un cuchillo afilado o una mandolina de 2 mm.

Reservarlas en un bol con agua fría hasta que estén listas para preparar.

Poner una cacerola o recipiente resistente al calor poco profundo a fuego medio o bajo. Incorporar la manteca y luego la cebolla y sazónelo todo bien.

Tapar la cacerola y dejar freír la cebolla, sin dejar que llegue a dorarse, durante unos 5 minutos, hasta que tierna y transparente. Una vez escurridas las papas añadirlas a la cacerola, removiéndolas lentamente con una cuchara de madera hasta que queden cubiertas de manera uniforme con la manteca. Dejarlas cocer hasta que, una vez calientes empiecen a emitir vapor.

Añadir el caldo, el tomillo y el laurel. Removerlo todo una vez y dejarlo hervir a fuego lento. Rectificar la sal si es necesario; a continuación, cubrir las papas con papel manteca ligeramente untado con manteca y dejarlo en el horno por 45 minutos o hasta que el liquido haya desaparecido casi por completo y las papas estén tiernas. Perforar el papel con un trinche y retirar la bandeja del horno con cuidado, para evitar golpes de vapor. Servir las papas calientes

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